miércoles, 21 de mayo de 2008

El día en que desaparecieron los heavys

Hoy he tenido una horrible pesadilla, me he despertado aterrorizado, tan espantado que pensé que el mundo se habría colapsado a raíz de este suceso.

Yo ayer me quede dormido como todos los días, pensando que iba a soñar con una gran juerga, y no, soñé que me fui de copas por ahí con mi amigo Blas, hasta aquí normal, es lo que sueño habitualmente, pero ocurrió algo raro.

Entramos a un bar y todo el mundo iba de traje, como de bodas, y obviamente nosotros pensamos que eran los invitados de una boda que habían entrado a tomar algo, así que nos marchamos y fuimos a otro bar y paso lo mismo, un montón de tíos trajeados y un montón de tías vestidas de cortina o de tapizado de silla, no distingo muy bien entre estos dos tipos de telas, pensamos, pues otra boda, y tiramos para otro bar, y lo mismo, y así un bar tras otro. Hartos ya de los trajes de pingüino, de los tíos con sogas al cuello(corbatas las llama Blas, pero si aprietas mucho de ellas valen para lo mismo que las sogas) y de los trajes de cortina, y sospechando que algo raro sucedía, eran demasiados invitados y demasiadas bodas para un día, decidimos ir al último reducto heavy de la ciudad, pero cuando entramos al bar fue horrible, ¿dónde estaban los heavys?, ¿en que se habían convertido?, iban todos vestidos de pingüino, con el pelo corto y engominado, con zapato fino, ¿dónde estaban sus camisetas de los suaves, sus largas y lisas melenas?, ¿qué estaba pasando?, era algo horrible, había desaparecido todo ser humano que no iba vestido de bodas de la superficie de la tierra, hasta los heavys habían sucumbido. Entonces miré a Blas y me miré a mi, y vi que los dos íbamos vestidos de pingüino, con zapatos finos, y con la soga al cuello, me pase la mano por el pelo y estaba engominado ¿Dios mío que está pasando?, entonces aterrorizado, empapado de sudor y con la respiración entrecortada, me he despertado, he visto que estaba en mi cama, con mi pijama, me he pasado la mano por mi pelo, y corría estupendamente, señal clara de que no llevaba gomina, me he vestido, normal por supuesto, he salido a la calle he caminado y corrido hasta cruzarme con un heavy, si, un heavy como Dios manda, con sus largas melenas y su camiseta de los suaves, menos mal que ha sido solo una pesadilla y la gente no anda vestida por la calle como de bodas todo el día, menos mal, por que los zapatos eran de lo mas incomodo.

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