Berlín día 3, 1 de Mayo

Puesto que el uno de mayo es festivo en prácticamente todo el mundo, dejamos para ese día las actividades al aire libre, que no cierran aunque sea fiesta, a demás hicimos bien, puesto que la cantidad de turistas aumento ostensiblemente ese día.
La cosa fue que se puso a llover, a llover con ganas, durante toda la mañana, así que no nos quedo mas remedio que peregrinar por la ciudad en busca de un paraguas, por cierto, no me han enseñado en la academia como se dice en alemán.
Decidimos ir a ver la parte oeste de la ciudad por la que aún no habíamos pasado, así que fuimos a parar a la estación del Zoo, donde encontramos un paraguas bueno, bonito y barato, y transitamos, así que nos paseamos por esa parte de la ciudad, y yo me enteré de que en Berlín había zoo, y a mi me gustan mucho los zoos, por que allí esta mi animal favorito el hip, hip, popotamo, pero no accedían a llevarme, me tuvieron viendo escaparates, en vez de meterme al zoo, y una iglesia medio caída con una torre mas moderna al lado, en vez de llevarme al zoo. Después me llevaron hasta Charlottenburg, a ver un palacio, me dieron de comer salchichas de esas con curry que están muy buenas, pero no me llevaron al zoo.
Me llevaron a pasear por el Tiegarten, me pasaron por en frente del zoo pero entramos, me asomaron por una verja a ver unos burros que se veían de gratis esperando que así me conformara, pero no me llevaron al zoo, y ya nos alejamos.
Me subieron al metro, muy triste, por no haber ido al zoo, y me llevaron hasta el cacho mas grande de muro que queda en pie, allí me anime un poco al encontrar al señor potato dibujado, así que paseamos por el muro, nos fuimos a la parte centro del oeste, a ver la Karl Marx Alle, debe ser una calle llena de ministerios, de hecho todo el oeste deben ser ministerios, por que son edificios muy grandes y de cemento, aunque Blas me dice que no, que eso es costumbre comunista.
Por la noche nos fuimos a cenar al sony center, un sitio muy chulo, donde hay una cúpula que tiene luces y cambia de colores, y nos dimos una vuelta viendo los edificios de Berlín iluminados, que la verdad están muy bonitos. Me gusto este día, aunque no me llevaron al zoo.